Víctor Rodríguez Padilla, director de Petróleos Mexicanos (Pemex), informó sobre una fuga de gas amargo en la refinería de Deer Park, Texas, que dejó un saldo de dos personas fallecidas y 13 más heridas.
En la conferencia matutina en Palacio Nacional de la presidenta Claudia Sheinbaum, Rodríguez Padilla detalló que los cuerpos de los trabajadores fallecidos no pudieron ser recuperados hasta la madrugada debido a la contaminación en la zona afectada por gas sulfhídrico, una sustancia altamente tóxica.
El titular de Pemex señaló que, tras la fuga, 35 personas resultaron afectadas, de las cuales 13 fueron trasladadas al hospital por protocolo, aunque su estado de salud es estable.
Los dos fallecidos eran empleados de una empresa de mantenimiento externa contratada por la refinería, no trabajadores de Pemex.
Rodríguez Padilla aseguró que se notificó a las autoridades locales, estatales y federales de Texas inmediatamente después del incidente.
En cuanto a las causas del accidente, indicó que se está realizando una investigación para determinar el origen de la fuga, y que no se harán especulaciones hasta que se tenga un análisis completo.
Actualmente, la refinería de Deer Park opera a capacidad mínima debido a la situación, pero se espera que las operaciones normales se reanuden en las próximas horas.
La planta, adquirida por el gobierno mexicano en 600 millones de dólares, incluía una deuda de 980 millones de dólares al momento de la compra.